Las cosas de la MAMMA

Ingredientes:

400 gr. de nata de montar
300 gr. de queso crema
150 gr. de azúcar glass
7 hojas de gelatina neutra
2 mangos grandes maduros
1 paquete de bizcochos de soletilla
Ralladura de un limón
Almíbar:
200 ml de agua
200 gr. de azúcar
3 clavos de olor
1 palo de canela
1 cucharadita de matalahúga

Modo de hacerlo:
 
Ponemos las hojas de gelatina en un cuenco con agua fría a remojar, hacemos el almíbar poniendo el agua a fuego medio y añadimos el azúcar, los clavos, el palo de canela y la matalahúga,




remover para que el azúcar quede disuelto y dejar uno 15 minutos hasta que espese el almíbar, apagar el fuego y dejar que enfrie (se puede tener hecho del día antes)




En un molde desmoldable poner papel vegetal en el fondo, cerrarlo y rellenar con una capa de los bizcochos, empaparlos de la gelatina previamente colada y reservar,




Montar la nata (que debe estar muy fría) y cuando empiece a hacer picos añadir el azúcar glass,
seguir batiendo hasta que absorba toda el azúcar, meterla unos minutos en el congelador.




En otro bol batir el queso crema y añadirlo con movimientos suaves (para que no se nos baje) a la nata montada que estará bien fría,




pelamos y cortamos un mango y lo ponemos en un vaso para triturarlo hasta que quede puré,




pelamos el otro mango y una mitad la cortamos en cuadraditos y la añadimos al puré para que se vean trozos al cortar la tarta, la otra mitad la reservamos para el adorno final,




calentar la mitad del puré de mango en el microondas y al romper a hervir echar la gelatina escurrida,
remover hasta que quede disuelta y añadir el resto del puré para atemperarlo.
Incorporar el puré de mango a la crema de queso y remover hasta integrar todos los ingredientes,




Cubrir completamente con la mitad de la crema los bizcochos de soletillas,




poner otra tanda de bizcochos encima de la crema, y empaparlos bien con el almíbar,



 
añadir el resto de la crema por encima cubriéndola por todos lados con la crema y meterla en el congelador unos 10 minutos para que quede firme.


Cortar el medio mango en lonchas finas y cuando tengamos la tarta bien fría adornarla a vuestro gusto,



meterla en la nevera hasta que se vaya a consumir, (mejor de un día para otro)
Se me olvido poner (y es justo poner su nombre) que esta tarta se la vi a mi querida amiga Nieves  del blog   dulceysalado



Esta tarta la hice este verano y solo comimos la mitad, el resto lo congele y os aseguro que esta aun mas buena congelada, es comer tarta de mango helada.